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sábado, 3 de agosto de 2013

El debate Cesc y el pragmatismo de Gerardo Martino

Cesc podrá gustar más o menos, pero es incuestionable su facilidad para ver puerta. Ayer dos goles llegando desde atrás. No hay un perfil así en la plantilla. Quizá lo sea Sergi Roberto en un futuro próximo, aunque en su primera temporada, lo más importante es que se asiente y vaya adquiriendo experiencia. Apunta muy buenas maneras el canterano, pero en estos momentos lo veo más pasador y apoyo en corto que decisivo en los metros finales.

Para entendernos, es más Iniesta que Fábregas, un papel, por cierto, para el que estaba predestinado Thiago Alcántara, aunque todos los técnicos que le han tenido bajo sus órdenes, hayan insistido e insisten en situar al ex-azulgrana, en zonas más de creación.

Cesc es intransferible. Así lo dicta una cláusula de rescisión muy elevada y así lo confirmó la junta directiva hace pocos días cuando fue preguntada al respecto. Además es culé. Apostó fuerte en su momento para volver al Barça y dudo que pueda hacer algo que perjudique al equipo o su futuro dentro de él. Gerardo Martino comienza a darle forma a este nuevo proyecto, ilusionante por otro lado y el de Arenys se ajusta al tipo de futbolista que puede hacerlo funcionar a las mil maravillas. El gol, la llegada, el juego asociativo, los conceptos que impregnan el ideario barcelonista los conoce y ejecuta a la perfección. Eso sí, El "tata" debe recuperar algunos aspectos de su juego que le hicieron grande en el Arsenal y que por algún motivo se han diluido un poco durante su estancia en el Barça. Me refiero sobretodo a conceptos defensivos. Presión intensa tras robo en campo rival, ocupar mucho más campo, más recorrido cuando te ganan la espalda y sobretodo, mayor regularidad. Fábregas baja mucho su rendimiento en las segundas partes de la temporada.

En mi opinión, el de Arenys debería salir a la palestra para confirmar al aficionado culé su deseo de continuar en el transatlántico blaugrana. No estamos hablando de un rumor más del verano futbolístico. El propio entrenador del Manchester United ha confirmado su interés por el futbolista. Se sabe además que Cesc, en el club de la Premier, tendría el papel de estrella indiscutible, algo que en el Barça se reserva para Messi, Neymar e Iniesta. Es decir, se entiende que el canto de sirena se emite megáfono en mano.

Dicho todo esto, en el hipotético caso que Fábregas anunciara públicamente su deseo de recalar en el club de Manchester, el Barça debería condicionarlo siempre al ingreso de al menos 50 millones de euros y a tener fichado un recambio de plenas garantías (La salida de Thiago Alcántara influye en eso). En el mercado solo encuentro una opción que me convence, se llama Gündogan. Un futbolista que auna lo mejor de Xavi y lo mejor de Cesc. No obstante parece muy complicado que el Dortmund, tras la venta de Götze, admita sentarse a negociar a estas alturas de pretemporada por uno de sus jugadores clave. Así las cosas e insisto, siempre que Cesc quiera marcharse, yo acordaría una venta para la próxima temporada, tiempo suficiente para ir negociando con tranquilidad y en condiciones más lógicas, la compra de Gündogan.

Gerardo Martino en rueda de prensa, fue transparente en el asunto Cesc: "Hablé con Cesc. Le dije lo que pensaba y no se me ocurre no contar con él. La decisión es suya, pero tengo expectativa que se quede". Es decir, Cesc le ha pedido al técnico cual va a ser su rol esta temporada y el "Tata", tras la conversación, no las tiene todas consigo. Es consciente que Cesc se siente tentado y que lo está estudiando. Con esta inteligente frase, el nuevo técnico azulgrana invita al futbolista a pronunciarse públicamente al respecto. Y en mi opinión acierta. Tanto el Barça como Cesc necesitan tranquilidad y eso pasa por atajar de una vez cualquier atisbo de duda, sea en uno u otro sentido.

Por cierto, y al hilo de Gerardo Martino. Cada día me convence más el ex de Newell's. Ayer se vió una muy buena versión del Barça. Intenso, motivado, con una línea de presión alta... Creo que de su mano veremos al mejor Alexis y eso sería una gran noticia. El tridente Neymar-Messi-Alexis puede ser demoledor. Además, su confianza en Dongou, del que ayer dijo: "Dongou nos da una alternativa de 9 distinta" y en Bagnack, evidencia que sabe perfectamente cuales son las necesidades actuales del equipo. Si Rosell no se las trae de fuera, las tomará de dentro. Lo dicho, un entrenador pragmatico y con las ideas muy claras.

David Aparicio - banquilleros.com

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